Para aquellos que han sufrido adversidad o desgracia y la encuentran difícil de aceptar sin
quejas o resentimiento, ya que juzgan la vida en gran medida por el éxito que trae. Sienten que no han merecido tanta adversidad, que es injusto, y se amargan. A menudo muestran menos interés y menor actividad en las cosas de la vida que antes gozaban.
Dr. Edward Bach
– Los Doce Curadores y Otros Remedios
Willow es un remedio floral extraordinario, y útil de muchísimas maneras, es una de las esencias florales que están muy popularizadas por su utilización con el resentimiento y rencor, y sin embargo su acción es todavía más amplia, pues tiene la capacidad de hacernos recuperar el ánimo y el deseo de aquello que alguna vez nos hizo felices y que ahora, por circunstancias de la vida, ya no disfrutamos más.
El remedio floral se encuentra clasificado dentro de la familia "Desaliento y desesperación", lo cual nos da una clave del tipo de emoción que equilibra. El sentimiento de Willow es de descontento, inconformidad, queja, la sensación de injusticia respecto a una situación que debió haber sido de alguna manera pero por alguna adversidad no se ha materializado como pensamos que debía de ser, y esto nos desanima, nos enoja, nos hace ver la vida desde un filtro de victimas y de fracaso.
Ahora, Willow no viene a decirnos que ahora absolutamente todo es nuestra responsabilidad y no hay factores externos que nos causen dificultades, lo que viene a enseñarnos es a ir poco a poco aceptando la vida como viene y ganar el coraje y ánimo para poder darle un giro a la situación, aún si ya no queda mucho por hacer. El dejar ir, pasar página sin resentimientos, quejas o rencores es ya avanzar, y seguramente nos abre a algunas posibilidades que no hemos considerado por estar sumergidos en el desaliento.
Creo que todo el mundo tiene derecho a quejarse, y a sumergirse en sus miserias si eso les hace falta, el exceso de optimismo y exigencia que se nos demanda en el mundo moderno en ocasiones no nos permite afrontar nuestros desánimos y por lo mismo no hacemos conciente aquello de lo que ya no queremos más. Eso a la larga hace crecer el resentimiento, y si bien también creo que cada persona tiene el derecho de elegir si quiere estar enojada o no, llega un momento en la mayoría de los casos, en que cansa el rencor y la queja, y comienzas a desear algo más que la amargura.
En esos momento es cuando willow nos ayuda a ir dejando poco a poco aquello que nos pesa porque no fue como hubiéramos querido y nos devuelve el ánimo para comenzar a disfrutar una vez más de la vida, con una aceptación más cálida y serena de las situaciones. Esto aplica para personas que nos han defraudado y con las que tenemos resentimiento, fracasos económicos, escolares o cualquier situación cuya vivencia del resultado no haya sido el deseado y eso cause recelo, amargura o desaliento.
Willow es una flor mágica, que nos permite dejar nuestros pesares atrás y retomar las cosas con una perspectiva más fresca y con mayor sabiduría, pues de los fracasos y adversidades también se aprende, y con ellos nos volvemos más sabios. Quizá por eso la abuela sáuce en Pocahontas era la mejor consejera, la sabiduría en ocasiones no llega como un rayo de luz divina iluminándonos desde el cielo con angelitos alrededor, la mayoría de las veces la obtenemos después de haber vivido y aprendido de nuestras miserias y de haber tenido que nadar en la mierda de la existencia, y un día no querer hacerlo más. Y ahí está siempre Willow, esperando tendernos la mano y darnos una nueva oportunidad.
